1.-Asistir a los entrenamientos programados y a la presentación que el
Sacerdote haga ante la comunidad consagrándolos oficialmente como Ministros Lectores.
2.-Recibir la programación enviada por el coordinador y darle cumplimiento.
En caso de impedimiento llamar a su reemplazo. Tener en cuenta que primero se deberá llamar al sustituto que figura en la
programación y si este no pudiera, a cualquiera que esté en la relación aprobada de los lectores. Abstenerse de llamar a personas
que no figuren en la lista.
3.-Presentarse al servicio con 15 minutos de antelación con vestimenta
apropiada, los caballeros con saco y corbata . Luego revisar en la Sacristía el libro de las lecturas, verificándo las que
corresponden al día, las mismas que deberán haber sido ya leídas , practicadas y meditadas en casa. Practicar en el Manual
para Proclamadores de la Palabra las lecturas correspondientes al Leccionario Mexicano (LM). Los lectores que no hayan recibido
el Manual para Proclamadores de la Palabra, por favor ponganse en contacto con la Coordinadora de Lectores. Terminada la revisión
de las lecturas el libro será colocado en el Ambón.
4.-El primer y segundo lectores ingresarán en la procesión de entrada
destras del monaguillo que lleva la Cruz. Al llegar hasta el altar y después de la genuflexión continuaran hasta el lugar
donde se encuentran sus asientos y reclinatorios.
5.-En la procesión de salida se colocaran al costado del Sacerdote dando
frente al altar. Cuando el Sacerdote haga la genuflexión los Ministros Lectores procederán a hacerla. Luego el Sacerdote dará
la vuelta hacia el corredor de salida y los Ministros Lectores se colocaran delante del Sacerdote y detrás del Monaguillo
con la Cruz y seguirán en procesión hasta el hall de entrada..
6.-Antes de subir al podio cada lector efectuará una venia hacia el Tabernáculo
y luego subirá al podio, tomará unos segundos para mirar a la comunidad y se abstendrá de decir “Primera Lectura,…”
directamente dirá “Lectura del Profeta... ó Lectura de la Carta del Apóstol... de acuerdo a lo que corresponda, al término
de la lectura dirá “Palabra de Dios”, dejará la página que corresponde al Salmo y bajará del podio haciendo nuevamente
una venia antes de sentarse (en caso de que el Salmo no sea cantado le dará lectura usando para ello el Misalete). El segundo
lector seguirá el mismo procedimiento absteniendose de decir: “Segunda Lectura…”, directamente dirá “Lectura
del Libro del...ó Lectura de la segunda carta...” de acuerdo a lo que corresponda, al término de la misma dirá “Palabra
de Dios”.
7.-Después del Credo y de la introducción del celebrante, el diacono o
el primer lector efectuará la lectura de las peticiones que fueron entregadas para la Misa.
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